La travesía llegó a su fin. Las Leonas cayeron por 4 a 0 ante Holanda en las semifinales del Mundial de la Haya, y ahora deberán disputar la medalla de bronce con Estados Unidos, rival con el que igualaron en la fase de grupos.
El equipo comandado por Luciana Aymar jugó con un alto nivel de nerviosismo ante su eterno rival, dueño de casa. Los tres goles que recibió en el primer tiempo (Waard, Paumen y Lammers –hizo otro en el complemento–) fueron golpes suficientemente contundentes como para que el conjunto nacional no presentara oposición en los minutos restantes.
Después del partido llegó el desconsuelo de la capitana, que no pudo contener sus lágrimas en conferencia de prensa y se mostró dolida por su rendimiento. “Tengo la bronca de no haber podido brindarme al ciento por ciento a mis compañeras, y no haber disfrutado toda la competición”, afirmó refiriéndose a la distensión en el isquiotibial derecho que la marginó de algunos encuentros.
Pero además, la rosarina de 36 años se refirió implícitamente a su retiro, cada vez más próximo. “Voy a disfrutar del último partido y a tratar de ganar una medalla”, señaló. El sábado a las 7.30 (hora argentina) jugarán contra Estados Unidos por la medalla de bronce, mientras que holandesas y australianas pelearán el primer puesto.Por su parte, Los Leones jugarán hoy, desde las 10.15, las semifinales ante Australia. Holanda e Inglaterra integran la otra llave.