Hace 75 años Benito Quinquela Martín inauguró el Jardín de Infantes N.° 1 en los terrenos que él había donado en el barrio de su inspiración: La Boca. Quinquela soñaba con «que los pequeños empiecen a sentir la belleza y la alegría sana de vivir» por eso el edificio está lleno de color, obras de arte y motivos infantiles pintados por el artista boquense Roberto Ranazzo. Situado en General Gregorio Aráoz de Lamadrid 648, el Jardín linda en su contrafrente con la ya entonces construida Escuela «Pedro de Mendoza» y el Museo de Bellas Artes «Quinquela Martín», también donados por el reconocido pintor argentino.
En este aniversario, el programa Huellas de la Escuela junto con la conducción escolar trabajaron en la recuperación de la historia del Jardín y de su patrimonio histórico. A través de un enfoque interdisciplinario se buscó resaltar y afianzar la fisonomía y el espíritu quinqueleano y boquense del Jardín. Esos ejes fueron los que guiaron la intervención en dos sectores de circulación común como espacios de museo.
Quinquela brindó a la comunidad de La Boca su proyecto de creación de un polo cultural, educativo y sanitario al que pertenece el Jardín junto con la Escuela Primaria, la Escuela Técnica y el museo de bellas artes. Él consideraba que sus donaciones eran una manera de «devolver algo» al barrio que le dio la oportunidad de crecer como artista. En su poema Francisco Gallardo Sarmiento (h) expresó las buenas acciones del artista, con estos versos escritos en 1961:
Junta ahorros y construye escuelas,
regala museos y entero se da
para que los pibes del barrio querido
no conozcan nunca la necesidad.
Y hoy sigue pintando como un estudiante
porque a sus ensueños nunca pone fin
el que en esta historia que PARECE CUENTO
llevar como nombre: ¡QUINQUELA MARTÍN! (Archivos Quinqueleanos. 2012. p. 28.)