La Legislatura organizó el II Congreso sobre las funciones del Consejo de la Magistratura (CM) con tres paneles sucesivos en el Salón San Martín y la presencia de autoridades del ámbito judicial, legislativo y ejecutivo. El diputado Daniel Presti (PRO) fue el primero en dirigirse al público: “Es un gusto y un honor para la Legislatura tener a presidentes y vicepresidentes de los Consejos de la Magistratura de la Nación y Ciudad”, donde exhortó a que “trabajemos de manera coordinada para que la justicia sea de la ciudad” en relación al traspaso de competencias. El moderador Daniel Rodríguez Masdeu, director del Instituto de Derecho Parlamentario del Colegio Público de Abogados de la Capital Federal, en primera instancia pidió un minuto de silencio para recordar al recientemente fallecido presidente del Consejo de la Magistratura porteño, Enzo Pagani, que será reemplazado por Silvia Lorelay Bianco a partir de mañana, cuando preste juramento en la sesión de mañana de la Legislatura porteña.
Adriana Donato, del Consejo de la Magistratura de la Nación, destacó que la institución que preside se creó como “un límite al sistema presidencialista en cuanto a la elección de los jueces”, por la reforma de la Constitución de 1994.  Las funciones que tiene a cargo son la de administrar los recursos de la justicia; seleccionar magistrados y ejercer facultades disciplinarias. Sobre este punto sostuvo que “someter a un magistrado a un plazo máximo de 3 años me parece un despropósito”, y “la remoción requiere de dos tercios de los votos y con la integración actual, es difícil lograrlo”, que lo atribuyó a la reforma de 2006, que llevó de 19 a los 13 miembros actuales. Donato celebró el encuentro: “que estemos los integrantes de los dos Consejos de la Magistratura de Nación y Ciudad, hace que nos podamos enriquecer con las múltiples experiencias”
Santiago Otamendi, secretario de Justicia de la Nación describió las funciones establecidas de los CM por las Constituciones. También sostuvo “necesario diseñar políticas de recursos humanos”  y  abogó por  “la participación ciudadana es necesaria y sea un mecanismo de selección, como podría ser una audiencia pública”, entre otros conceptos innovadores. Marcela Basterra, vicepresidenta del CM de la Ciudad confesó que “estamos muy tristes, ya que tendría que estar nuestro presidente, Enzo Pagani; que luchó porque la Legislatura nos aprobó los convenios de traspaso”.
Recordó que “la Argentina siguió el impulso de reformas continentales en 1994, con la nueva Constitución”, ya que antes de los CM “no era bueno que estuvieran juntas la administración de justicia y sus recursos”. Valoró a los CM, ya que con sus integrantes, “pone freno a la discrecionalidad de los ejecutivos”.  Sobre el traspaso de la justicia de Nación a Ciudad, Basterra dijo que “tenemos el aval de ambos  ejecutivos y de la Corte Suprema, que hace 22 años dijo que la justicia fuera de la órbita de la ciudad era una cuestión transitoria”, por lo que instó a “poder cumplir con esta postergada autonomía de la Ciudad de Buenos Aires”.
Para finalizar, Marcos Córdoba, decano de la facultad de Derecho de la Universidad Abierta Interamericana, consideró la legislación vigente y destacó “la actividad férrea que ha realizado Enzo Pagani”.Luego de esta apertura, se dio paso a la mesas de expertos integrada por los consejeros de la Magistratura de la Nación Leónidas Moldes, Luís María Cabral y de la ciudad Vanesa Ferrazulo, Marcelo Velázquez y Darío Reynoso.  Para finalizar disertaron Miguel Piedecasas, vicepresidente del Consejo de la Magistratura de la Nación y  José Ricardo Enríquez, subsecretario de Justicia de la ciudad. Durante el Congreso estuvo presente la diputada Carolina Estebarena (PRO).