Por iniciativa del diputado Claudio Heredia (BP), la Legislatura porteña realizó un acto de reconocimiento a Jesús Eugenio Romero, al cumplirse 40 años del comienzo de su carrera como boxeador, que luego lo llevó a ser entrenador de jóvenes y "ejemplo como deportista y por su obra humana y solidaria". El diputado Heredia calificó al agasajado como un "campeón de la vida, más allá de lo deportivo.
Es un referente social, un referente del barrio, una persona de bien, un actor social, es gente comprometida", enfatizó. Lo acompañaba la legisladora Silvia Gottero (BP), en el salón Montevideo del palacio legislativo. El homenajeado, por su parte, señaló que su principal preocupación es "sacar a los chicos de la calle" mediante el trabajo de entrenador en su gimnasio del barrio Rivadavia, en el Bajo Flores. "Prefiero sacar a cinco chicos de la calle que sacar un campeón", sentenció.
Romero, de origen jujeño, empezó a practicar como boxeador en el Bajo Flores, luego en el gimnasio del Parque Chacabuco y posteriormente en el Club Unidos de Pompeya. Fue pugilista olímpico y en el profesionalismo obtuvo los títulos argentino y sudamericano de los livianos. Se retiró de los cuadriláteros con 300 peleas disputadas (140 en el campo rentado).
En el barrio Rivadavia (donde siempre vivió) ayudó a su esposa en un comedor comunitario y fundó luego un gimnasio con el objetivo de formar jóvenes en el deporte y alejarlos del flagelo de las drogas y el alcohol. Paralelamente creó una asociación civil para solventar esas tareas y también fomentar el trabajo, ayudar en la búsqueda de empleo y capacitación de desocupados. La entidad "Entrenar por la Vida" ,que dirige, brinda estos servicios a la comunidad a lo que se suma un comedor comunitario, apoyo escolar y ayuda en prevención sanitaria.