En los últimos siete días con la habilitación de siete nuevos paradores la Ciudad sumó 780 camas para que todas las personas en situación de calle pasen la cuarentena. Se suman a las 2.100 preexistentes en los 33 Centros de Inclusión Social que funcionan regularmente en la Ciudad. Desde su apertura, 680 personas ingresaron y ya cuentan con cama, duchas, comida y contención de equipos profesionales.
Los siete paradores se suman a los 33 Centros de Inclusión Social que funcionan todo el año. Se trata del Polideportivo Parque Chacabuco (Comuna 7), donde se agregaron 200 plazas destinadas para familias; Parque Avellaneda (Comuna 9) que sumó 130 plazas para familias; Parque Sarmiento (Comuna 12) con 148 plazas para hombres; el Polideportivo Martín Fierro (Comuna 3) con 100 plazas para hombres; el
Olímpico que suma otras 100 plazas y dos destinados para personas mayores, población de riesgo: Uspallata (Comuna 5) con capacidad de 90 plazas y Venialbo (Comuna 5) con 12 plazas. “El objetivo principal es que no haya personas en situación de calle durante la cuarentena por el coronavirus. Estamos redoblando nuestros esfuerzos para que todas las personas tengan un lugar donde quedarse, poder dormir, comer y estar más protegidas”, explicó María Migliore, Ministra de Desarrollo Humano y Hábitat porteño.
Estas nuevas 780 camas se suman a las 2.100 habilitadas durante todo el año en los 33 Centros de Inclusión Social, distribuidos por toda la Ciudad. Ya son 2.880 lugares. Esto ya permitió que más de 680 personas en situación de calle ingresen a los paradores. Luego de decretada la cuarentena por el Gobierno Nacional, el Ministerio de Desarrollo Humano de la Ciudad decidió extender el horario de atención las 24 horas los siete días de la semana para facilitar el ingreso a los paradores.
Además, se fortalecieron los equipos de atención de la Línea 108, donde puede llamar la gente para alertar de personas en situación de calle: desde que se inició la cuarentena el número de llamados fue en aumento. Mientras que en febrero de este año se recibían un promedio de 350 llamados diarios, durante la primera semana de cuarentena se llegaron a recibir más de 1.500. Otra medida implementada fue la de fortalecer el equipo del BAP -Buenos Aires Presente-, con 60 equipos integrados por asistentes sociales y personal especializado para realizar el abordaje de las personas en situación de calle. De ellos, unas 100 personas recorren la Ciudad durante la noche para ayudar a quienes no quieren ir a los paradores.