Para explicar el 2-1 de Boca sobre Atlético de Rafaela hay que entregar dos fundamentos. Porque la victoria, la cuarta consecutiva en este Inicial que sirvió para quedar como líder y dejar atrás el mal trago luego de la eliminación en la Sudamericana a manos de Independiente, se sustenta en la cabeza de Lucas Viatri y en las manos de Oscar Ustari, que tuvo una atajada de colección para que los tres poroto y la punta quedaran en casa, más allá de que tuvo que mudarse a Vélez por culpa de la intolerancia de sus plateístas…
El equipo de Julio Falcioni volvió a jugar mal. No hubo cambio de sistema táctico, ya que el DT mantuvo el módulo 4-3-1-2, con Pochi Chávez como enganche. Sin embargo, metió mano en la defensa: Clemente Rodríguez pasó a marcar el lateral derecho para propiciar el ingreso por el carril izquierdo de Juan Sánchez Miño. También retornó Walter Erviti tras la lesión. Pero nada se modificó en el juego. Es más, sufrió con los embates del valiente Atlético de Rafaela, que se anima a atacar como pocos, pese a que no tiene demasiadas variantes para ofrecer.Así las cosas, Boca se encontró con la ventaja parcial a partir de la primera genialidad de Viatri. Desborde hasta el fondo de Clemente Rodríguez por la derecha, centro al punto penal y cabezazo a lo Martín Palermo del centrodelantero -esta vez muy solitario, con Santiago Silva perdido- para romper la parda. Vale dos Lucas. Los santafesinos, que hasta entonces dominaban el juego, siguieron buscando, pero chocaron sistemáticamente con ese frontón en el que suele convertirse Guillermo Burdisso.Ya en la segunda parte, la Crema se mantuvo en su postura de buscar el empate y tuvo su recompensa. Clemente perdió una pelota en la salida, Federico González mandó un centro al corazón del área, César Carignano la bajó de cabeza y Sebastián Carrera la mandó a guardar.
 
Parecía que Boca sentiría el impacto. Sin embargo, al toque, Viatri volvió a aparecer con otro cabezazo furibundo luego de un quirúrgico centro de Somoza. Así, el nueve llegó a los tres gritos en este Inicial. Pensar que el entrenador no lo tenía en sus planes…Sí, vale dos Lucas.Pero, ojo, no todo se lo debe a la testa de Viatri. Otro que hizo los deberes fue Ustari (aquí sí hay mérito del DT, que intenta recuperarlo). Osky tiene el mérito de haber salvado el triunfo en la última jugada del partido. Con una reacción a puro reflejo, el arquero le sacó un gran cabezazo a Ferro que se metía abajo, contra el palo derecho.Otro que vale dos Lucas…