El Gobierno porteño planea reemplazar las viejas luminarias del espacio público por otras con tecnología LED, que son más resistentes, alumbran mejor y consumen menos energía. En una primera etapa, fueron intervenidas las avenidas 9 de Julio, Santa Fe, Juan B. Justo, Juramento y Figueroa Alcorta, entre otras, con un total de 14 mil luminarias. En tanto, para lo que queda del año continuarán con Rivadavia, Callao, Leandro N. Alem y Cabildo.

El proyecto, que se inició a mediados del año pasado, prioriza las grandes avenidas, los parques y los recorridos del Metrobús, cuyas paradas ya cuentan con la nueva iluminación. Pero más adelante abarcará a las calles de barrio, aunque en muchos casos será necesario cambiar toda la columna.El contrato fue firmado con la empresa Phillips (en la licitación también se habían presentado las empresas General Electric, IEP y Reconstrucción Caños SA), y costará $380 millones en dos años.

La tecnología LED ofrece varias ventajas respecto de las lámparas de vapor de sodio que hay en las calles. Por un lado, la iluminación de las cuadras es mayor, lo que brinda más seguridad y facilita la visión de las cámaras de vigilancia.Otro beneficio importante es el ahorro. La Ciudad gasta hoy $124 millones anuales en energía, pero con las LED podría bajar ese gasto hasta un 40%, más un 30% el de mantenimiento porque las lámparas son más resistentes y duran unos 20 años.Un tercer avance es que el sistema LED permite la telegestión, un control centralizado y digital, con el cual se podrá saber al instante qué lámpara se rompió y en qué lugar.