Manejar en las calles porteñas se convirtió en un gran desafío en el último tiempo, pero a partir del inicio de las clases empeoró la situación. Cada vez son más las quejas de los vecinos por el caos vehicular que se produce en la puerta de los colegios. No sólo hay infracciones por mal estacionamiento, sino que aparecen autos en ¡triple fila! con el fin de estacionar cerca de la entrada a la escuela para dejar o buscar a los chicos.
La desorganización empezó el lunes 2 de marzo, cuando largó el ciclo lectivo. Y pareciera que la opción de ubicar el auto a un par de cuadras de los establecimientos escolares y caminar unos metros hasta la dirección exacta no es una alternativa para los padres. En cambio, las rampas y las veredas se transformaron en la opción elegida, sin tomar conciencia (ni hablar del respeto para el resto de los conductores) de los problemas que producen en el tráfico.
“Comienza la temporada de doble o triple fila. Gana, el que deja a los chicos lo más cerca de la puerta del colegio posible”, publicó en su cuenta de Twitter @Gus_Saldana, dándole una bienvenida con humor al desorden.En esa sintonía, la usuaria @CapritaMd se hizo cargo y confesó: “Marzo y mis hijos me transformaron en la madre que estaciona en la puerta del colegio en doble fila y le chupa un huevo todo. Ser de luz”.Ante la sucesión de faltas y molestos por dicha actitud, los vecinos empezaron a hacer denuncias. No sólo a través de las redes sociales, sino mediante la aplicación gratuita que lanzó el Gobierno porteño. ¿Cómo funciona? Desde sus celulares, pueden enviar fotos del infractor, el número de patente del auto y su ubicación a los agentes de tránsito, quienes evalúan la falta y aplican la multa correspondiente.