La ceremonia contó con la presencia de autoridades del Gobierno de la Ciudad, la plana mayor y miembros de la Policía de la Ciudad y Bomberos de la Ciudad, representantes de las fuerzas de seguridad y destacados veteranos y veteranas de guerra. Durante el acto, se rindió homenaje a los 649 soldados argentinos que entregaron su vida en defensa de la soberanía nacional y se reconoció el compromiso y la valentía de quienes regresaron del conflicto.

El Ministro de Seguridad porteño, Horacio Giménez, destacó la importancia de mantener viva la memoria de Malvinas y el reconocimiento a sus protagonistas: «Sepan que su sacrificio no ha sido en vano y que sus nombres permanecerán grabados en la historia de nuestra patria. Pero hoy también es un día para expresar nuestra gratitud a los veteranos y las veteranas que regresaron de las islas tras el conflicto armado, a quienes muchas veces se les dio la espalda y no se les reconoció como era debido.»

Además, Giménez hizo referencia a las difíciles condiciones que enfrentaron los combatientes en el campo de batalla, destacando que muchos de ellos apenas habían dejado atrás la adolescencia cuando partieron hacia las islas: «El frío, la escasez de recursos, la falta de abrigo y de material bélico, fueron pruebas que superaron con coraje.

Nuestros soldados pusieron todo lo que tenían que poner para lograr que hoy, 43 años después, sigamos sosteniendo que las Malvinas son y serán siempre argentinas, y esa demanda no es un capricho, sino una convicción que debemos ir pasando de generación en generación.»
Como parte de la conmemoración, se realizó la tradicional evocación a los caídos, la entrega de reconocimientos a los veteranos y veteranas, el descubrimiento de una placa conmemorativa, la colocación de una ofrenda floral y el esparcimiento de arena traída desde las islas. La ceremonia finalizó con la interpretación de la Marcha de Malvinas.