Mientras por las calles porteñas y de las ciudades más importantes del interior del país marchaban miles de personas en un cacerolazo multitudinario, la presidenta Cristina Kirchner encabezaba un acto en la provincia de San Juan por la inauguración de dos plantas industriales. Al grito de “volveremos, volveremos…” de sus militantes, la mandataria lanzó: “Yo, nerviosa, no me voy a poner ni me van a poner, que se queden tranquilos”.
En el inicio de su discurso, Cristina aseguró que “vivimos en un país tan diferente y una San Juan tan distinta a la de 2002”, y aseguró que en 2002 “nadie iba a imaginar” que con la visita del entonces candidato a presidente (Néstor) Kirchner “años después íbamos a inaugurar una fábrica como Lacoste, de Francia”Finalmente, la Presidenta dedicó un capítulo a su pelea con las provincias que le reclaman fondos y dijo que “cada gobernador y cada intendente deben interpretar lo que es gestionar”.