Además de Lionel Messi, el atractivo amistoso entre Argentina e Italia en homenaje al Papa Francisco tuvo otra ausencia relevante: la del propio Francisco. Pese a sus fanatismo por el fútbol, el Sumo Pontífice no estuvo en el Olímpico de Roma y siguió el encuentro desde la Casa Santa Marta, un hotel para huéspedes del Vaticano en el que se aloja desde que fue elegido papa en marzo. El Vaticano nunca confirmó que el pontífice fuera a asistir al encuentro en el estadio Olímpico de Roma, si bien varios medios argentinos habían sugerido en los últimos días, incluso la posibilidad de que realizara el saque de honor, algo que hubiera causado sensación. Un locutor recordó en español que el ex arzobispo de Buenos Aires Jorge Bergoglio plantó un árbol similar en la emblemática Plaza de Mayo y pidió que el olivo sembrado en el estadio Olímpico romano sirva "para transformar cada encuentro deportivo en el gran encuentro de la humanidad, por la paz y la unidad".
Entre el público del estadio se podía leer una pancarta que decía en italiano "Bergoglio uno di noi" ("Bergoglio uno de los nuestros"). "D10S y el MESSIas", se leída en otra, en alusión a ´Lio´ Messi, quien ayer regresó a casa tras la audiencia papal, debido a una sobrecarga muscular en el muslo izquierdo que ya le impidió la semana pasada realizar la última etapa de la pretemporada con Barcelona en Asia. El Papa le dijo ayer al entrenador italiano Cesare Prandelli que había recibido "muchas invitaciones" para asistir al encuentro, pero que en el Vaticano lo reprenderían por "indisciplinado". Al mismo tiempo, en las palabras dirigidas a jugadores y directivos, confesó que "no sabría a qué equipo apoyar". "Será muy difícil para mí animar, pero por suerte es un amistoso, y recomiendo que sea así", afirmó el hincha confeso de San Lorenzo de Almagro. Tampoco asistió al encuentro el "número dos" de la Santa Sede y también futbolero, el cardenal secretario de Estado, Tarcisio Bertone, aunque sí lo hizo una delegación vaticana de unas 60 personas, entre religiosos y seglares.