Después de poco más de 50 días, las distintas agrupaciones “villeras” que se instalaron al pie del Obelisco llegaron a un principio de acuerdo con el Gobierno de la Ciudad y hoy comenzarían a desarmar la carpa gigante que montaron en la Plaza de la República.Tras una serie de reuniones en la Defensoría del Pueblo, donde los representantes del acampe reclamaron viviendas y servicios básicos, las autoridades porteñas se comprometieron a colocar ambulancias en las villas y difundieron un esquema de obras en los barrios.

Mónica Zárate, una de las referentes del asentamiento precario, confirmó que las primeras diez casillas fueron levantadas en la noche del miércoles. Y hoy se presume que continuarán hasta dejar el lugar por completo.La protesta arrancó hace 53 días. Al principio fue una carpa, pero con el paso de los días sumaron más casillas precarias, donde cerca de 80 personas se turnaban para reclamar. Habían advertido que la manifestación continuaría hasta tanto el Gobierno de la Ciudad no ofreciera un plan concreto para urbanizar las villas.