Cajas con documentos apiladas y otras tiradas en el piso. Papeles por todos lados en una oficina. 16 mil sillas de ruedas oxidadas. Son algunas de las dramáticas postales que aparecieron del PAMI, tras la salida del gobierno kirchnerista. El actual titular del organismo, Carlos Regazzoni, denunció “un plan de robo sistemático de los recursos de los más necesitados”.
“Cuando llegamos al PAMI encontramos 16 mil sillas de ruedas oxidándose en galpones. Son 16 mil argentinos olvidados”, reveló el directivo. Y detalló que descubrieron, además, la existencia de dos clínicas fantasmas que supuestamente le prestaban servicios a la obra social de jubilados y pensionados: “Le facturaban al PAMI $25 millones por internaciones que no hacían”. Regazzoni explicó que «durante 10 años se montó una estructura de robo sistemático al PAMI. No fue una isla durante la Argentina de Lázaro Báez».