En medio de la detención de Pérez Corradi, vinculado al tráfico ilegal de efedrina y autor material del Triple Crimen de General Rodríguez, Macri llamó a «trabajar juntos para derrotar el narcotráfico».Fue en Rosario, durante el acto por el Día de la Bandera. Allí, frente al río Paraná, fue recibido por los vecinos al grito de “Sí se puede”. Luego, la misma arenga del PRO fue repetida por miles de niños que participaron de la promesa de lealtad a la bandera en el Patio Cívico del Monumento.
Antes de la ceremonia, hubo una marcha en su contra (llevaban carteles contra el tarifazo y los recortes en educación), pero un operativo de unos 70 gendarmes y un camión hidrante impidió que la columna se acercara a menos de 300 metros de lugar donde se desarrollaba el acto por el 20 de Junio. Hubo incidentes. Al respecto, un concejal rosarino que había participado de la movilización denunció represión por parte de Gendarmería en inmediaciones del Monumento. Eduardo Toniolli, del Frente Para la Victoria (FPV), sufrió un corte en la cabeza cuando se encontraba en la esquina de Laprida y Rioja, una de las intersecciones bloqueadas por las fuerzas de seguridad.
“Organizó todo tan bien que hasta tenemos un día maravilloso”, bromeó el jefe de Estado a la hora de felicitar a la intendenta Mónica Fein por los preparativos, que contaron también con la presencia de del gobernador Miguel Lifschitz, abanderados de cada provincia argentina y unos 2.000 ex combatientes de Malvinas.
En un breve discurso que rondó los siete minutos, Macri insistió en sus intenciones de “derrotar al narcotráfico” y lograr la “pobreza cero”. A su vez, destacó el haber “destrabado temas económicos” que no permitían el crecimiento del país y aseguró que “la inflación va a bajar”. Por otro lado, celebró el haber profundizado medidas sociales y subrayó: “Hemos vuelto al mundo para hacer nuestro aporte”. Para cerrar, repitió la palabra “trabajo” como un pedido “para todos los argentinos”.