La tendencia surge de un sondeo realizado por el Instituto de Estudios de Consumo Masivo (INDECOM) tomando como referencia las variables económicas derivadas de las medidas aplicadas por el Gobierno Nacional y de los acuerdos salariales. Estiman una fuerte recuperación en los volúmenes de ventas y que el PBI registraría una alza de más del 2.5% en 2017. Miguel Calvete, Presidente del organismo de estadísticas afirmó que “algunas medidas del Ejecutivo Nacional, como la devolución del IVA, el pago de sentencias y los incrementos de haberes a jubilados, los actualizaciones de las pensiones universales y las mejoras salariales derivadas de las negociaciones paritarias ya están empezando a producir un efecto positivo en el consumo”.

Al respecto, el estudio arrojó que “sólo la cancelación retroactiva de los dictámenes previsionales y la actualización de haberes dispuestas por el Gobierno volcarán más de $ 50 mil millones al consumo interno” y agregó que “a ello se deben sumar las subas en los valores de la Asignación Universal por Hijo y la extensión de su ámbito de inclusión, lo cual volcaría otros $ 3 mil millones más hacia fin de este año”.

A su vez, según el informe de la entidad, “internamente, la expansión de la demanda agregada también estaría impulsada por la obra pública, que incentivaría la creación de puestos de trabajo y el consumo en el corto plazo” y agregó que “otro de los factores será “la apreciación del tipo de cambio real, lo cual aumentará el poder adquisitivo de los salarios en dólares y el consumo de electrodomésticos y bienes durables, repercutiendo favorablemente en la industria de cara al próximo semestre».

En ese sentido, Calvete consideró que “se trata de medidas que mejoran las expectativas y que han puesto un piso a la caída del consumo, que en lo que va del año se ubicó entre el 3 y el 4 %”, a la vez que afirmó que “se prevé que también estimularán directamente el crecimiento de la economía en esos mismos porcentajes durante los próximos seis meses”.  Además, de acuerdo con las estimaciones de INDECOM, “en 2017 el Producto Bruto Interno registraría una suba que iría del 2.5% hasta incluso el 3.5%, en contraposición con la caída del PBI estimada para este año, que rondaría entre un 1,5 y un 2%”.

Según el sondeo, “cíclicamente, durante los años electorales, como lo será el próximo, se da un crecimiento del PBI porque el Gobierno inyecta mucho dinero en medidas que tienden a estimular el consumo de la gente”. Según Calvete, esa situación “también dificulta la comparación interanual con el año pasado y la convierte en “ficticia”, porque explicó que 2015 fue un año de elecciones generales en el que se destinaron muchos recursos directos e indirectos a incentivar el consumo en el mercado interno”.

Por su parte, el trabajo detalló que “la proyección toma como referencia los números entregados por la mayoría de los empresarios del sector relacionado con el consumo masivo y de bienes durables, quienes reconocen que en los últimos treinta días hubo un pequeño repunte y se muestran optimistas acerca de la posibilidad de que se produzca una importante recuperación en los volúmenes de ventas en el próximo semestre”.

En ese marco, el titular del organismo de estudios de consumo señaló que “se cree que en la medida en que se mantenga la desaceleración de los precios (lo cual se vislumbra en los últimos índices de inflación) la demanda empezará a recuperarse de modo tal que la reactivación llegaría a partir de octubre  y se profundizaría en noviembre y diciembre de este año (en el caso de los productos de consumo masivo), consolidándose en el primer trimestre del 2017 (sumando allí una suba sostenida en las ventas de bienes durables)”.

Finalmente, en síntesis, Miguel Calvete explicó que “en la medida en que la inflación baje y el poder de compra de los salarios se recupere, el consumo también irá hacia delante indefectiblemente”, porque señaló que “el argentino no es un consumidor conservador como lo son los chilenos, los uruguayos o los europeos, sino que tiene un comportamiento mucho más pendular, que hace que cualquier incremento en su ingreso inmediatamente se refleje en su nivel de consumo”.