En relación al rol asumido por el Defensor del Pueblo de la Ciudad de Buenos Aires, Alejandro Amor, de intervención en conflictos sociales en la vía pública, a través del programa de "Gestión de la conflictividad social" (Disposición DPCABA 36/17), este organismo toma como propio y pone en práctica de inmediato en la Ciudad de Buenos Aires, las Directrices para la Observación de Manifestaciones y Protestas Sociales elaboradas por la Oficina Regional para América del Sur del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos”. Alejandro Amor afirma que "en democracia el reclamo y la protesta se deben llevar a cabo en el marco del respeto a las diferencias, y siguiendo lo que dicta el comité de Derechos Humanos de la ONU"
SOBRE LAS DIRECTRICES PARA LA OBSERVACIÓN DE MANIFESTACIONES Y PROTESTAS SOCIALES
Se trata de una guía de asistencia práctica para todos los que ejercen la labor de observación de reuniones y acciones colectivas, realizada con el fin de facilitar el proceso de verificación del cumplimiento de obligaciones y estándares internacionales. Explica el monitoreo de las circunstancias que enmarcan las manifestaciones y protestas, así como también la recolección de información, su revisión y eventual e inmediato uso frente a vulneraciones a los derechos humanos.