En primera lectura (deberá pasar por Audiencia Pública antes de su sanción), se aprobó una iniciativa de Patricia Vischi (Ev) para que la estación Callao de la línea D de Subterráneos pase a denominarse "Callao – Raquel Liberman". Raquel Liberman, una joven judía de nacionalidad ucraniana que inmigró a la Argentina, era una de las tantas mujeres " importadas" para ser explotadas por una red de trata y prostitución.

Ella, a quien llamaban "la polaca" como a tantas otras prostitutas rubias sometidas por proxenetas,  decide denunciar en 1929 a sus explotadores y esa actitud valiente permitió desbaratar por primera vez en el país una red de proxenetas con ramificaciones internacionales. La denuncia de Raquel Liberman puso el tema de la trata en la consideración de la opinión pública y, en consecuencia, en 1935 la Municipalidad de Buenos Aires decretó la clausura de todos los prostíbulos.