La conjuntivitis es un proceso inflamatorio ocular que compromete a la conjuntiva: si dicho trastorno se extiende a la córnea se lo define como queratoconjuntivitis y si resultan afectados los párpados, blefaroconjuntivitis. Pueden tener causas infecciosas o no infecciosas y, de acuerdo al tiempo de evolución, se clasifican en agudas o crónicas. Los síntomas más frecuentes son ojo rojo, a menudo bilateralmente, irritación y malestar.

Puede estar presente también el lagrimeo, que puede ser de naturaleza acuosa, mucosa o purulenta, dependiendo de la causa. Las causas más comunes son infecciones (virales o bacterianas), alergias o irritación inespecífica originada en causas del entorno. Lavado de manos frecuentemente con agua tibia y jabón. Si no hay agua ni jabón, use un limpiador para manos que contenga como mínimo un 60% de alcohol.

Evitar tocarse o restregarse los ojos.
Limpieza de toda secreción alrededor de los ojos varias veces al día. Se debe lavar las manos primero y luego puede usar un pañuelo desechable para limpiar el área del ojo.
Lavado de manos después de aplicarse gotas para los ojos.
No usar la misma botella o envase de las gotas para los ojos infectados que para los sanos, aun cuando sea de la misma persona.
Lavar fundas de almohadas, sábanas, paños y toallas en agua caliente y detergente; después de tocar estos artículos deben lavarse las manos.
Evitar compartir artículos como toallas, sábanas y fundas de almohadas.
Lavar los anteojos cuidando de no contaminar los artículos que se puedan compartir con otras personas (como toallas).
No compartir el maquillaje para los ojos, la cara, los cepillos cosméticos, los lentes de contacto y envases ni los anteojos.
No utilizar piletas de natación durante la enfermedad.
Hospitales Oftalmológicos
Hospital Santa Lucía
Dirección: Avenida San Juan 2021, Barrio San Cristóbal
Hospital Pedro Lagleyze : Dirección: Avenida Juan B. Justo 4151, Barrio Villa Gral. Mitre