Durante esta histórica y sorpresiva pandemia mundial, en donde hace más de un mes, millones de personas en todo el mundo se encuentran encerradas en sus casas, el consumo de algunos estupefacientes (tanto legales como ilegales) comenzó a ser investigado ya que podrían ser peligrosos frente al coronavirus. Hace algunas semanas desde la Organización Mundial de la Salud (OMS) aseguraron que el alcohol puede poner a las personas en mayor riesgo de contraer el coronavirus, exacerbar la vulnerabilidad de la salud, los comportamientos de riesgo, los problemas de salud mental y la violencia.
Pero ahora, además del alcohol, el consumo de marihuana se coloca en el ojo de la tormenta. Lo que sucede, explicó el doctor Mitchell Glass, neumólogo y portavoz de la Asociación Estadounidense del Pulmón, es que lo último que buscamos durante esta pandemia es hacer más difícil que un médico o una médica, diagnostiquen nuestros síntomas. El Covid-19 es una enfermedad pulmonar», dijo Glass, y fumar cannabis puede confundir a los y las médicas a la hora de realizar un diagnóstico: «No deberías hacer nada que pueda confundir la capacidad de los trabajadores de la salud de hacer una evaluación rápida y precisa de lo que está sucediendo», explicó.
Según especialistas, fumar marihuana de manera crónica, (diariamente) daña los pulmones durante un período de tiempo. Los fumadores, las personas con Epoc y otras enfermedades pulmonares crónicas, así como las personas con asma moderada a severa, se encuentran entre los que corren un alto riesgo de contraer una enfermedad grave debido al Covid-19.Si bien una o dos secas de marihuana no se comparan con un cigarro, hay algunas propiedades únicas de un ‘porro’ que definitivamente son problemáticas para los pulmones incluso si eres un fumador nuevo.