El jefe de Gabinete porteño, Felipe Miguel dijo que en materia de salud, hoy en día en la Ciudad hay 62.878 casos confirmados de coronavirus, de los cuales 22.259 fueron dados de alta, y se registraron 1.356 fallecimientos. Mientras que en la Argentina los casos son 206.743 y 3.813 fallecimientos. El Gobierno porteño reforzó el sistema público de salud para que pueda dar respuesta y garantizar el bienestar físico y mental de todos los vecinos durante la pandemia. Y para que los profesionales de la salud tengan todo lo que necesitan, adelantó la compra de insumos para todo el año.

En ese sentido, Miguel destacó “a los directores de los hospitales de la Ciudad y a sus equipos, con quienes estamos en permanente contacto y trabajando más juntos que nunca”. Para combatir el virus se sumaron siete ambulancias y 543 nuevos respiradores. “Y acá quiero agradecer especialmente al Gobierno nacional por su contribución de 529 respiradores”, dijo.Se instalaron 20 Unidades Febriles de Urgencia (UFU), que son módulos específicos para atender casos sospechosos de coronavirus anexados a 20 hospitales de la Ciudad. Estos espacios permiten derivar a las personas que tienen síntomas de manera segura y se reduce la circulación en las guardias.

Hasta el momento las UFU atendieron a 40.472 vecinos, hicieron 34.023 testeos y tuvieron 13.421 casos positivos. Se sumaron más de 8.240 camas: 1.500 de internación general en hospitales, 450 de terapia intensiva específicas para pacientes con coronavirus, y 5.490 en hoteles. El centro de aislamiento creado en Costa Salguero cuenta con 800 camas para cuidados leves. La Ciudad cuenta con 50 hoteles que en un primer momento se utilizaron para quienes volvían del exterior y tenían que cumplir el aislamiento preventivo. Allí se alojaron 8.052 vecinos. Ahora, los hoteles se usan para los vecinos que tienen el virus y presentan cuadros leves que no requieren de un cuidado en un hospital o que están esperando el resultado.

“Todo el equipo de salud está trabajando con mucho compromiso y mucho amor para cuidarnos. En nombre de todos los vecinos de la Ciudad quiero decirles gracias”, expresó Miguel. Hay un gran consenso mundial sobre la importancia de detectar lo antes posible a quienes tienen el virus. Por eso, la Ciudad impulsó una fuerte estrategia de testeos barrio por barrio que permite identificar a tiempo casos positivos o sospechosos para aislarlos y así cortar la cadena de contagio. Miguel detalló que “hasta el momento hicimos 273.549 hisopados y 246.558 testeos rápidos para el personal de salud, de los geriátricos, los agentes de tránsito, las fuerzas de seguridad y los trabajadores del BAP y de los paradores de la Ciudad que están poniendo el cuerpo en esta pandemia”.

Además, en equipo con el Gobierno nacional, se activó el Plan DetectAR, que consiste en una búsqueda activa, recorriendo casa por casa, para identificar casos sospechosos. Hasta el momento el plan alcanzó a 34 barrios, se hicieron 41.128 testeos, de los cuales 16.413 dieron positivos. Para que los adultos mayores y las personas de riesgo se den la vacuna contra la gripe sin exponerse al virus en una guardia o en un hospital, este año se hizo la campaña de vacunación en 82 sedes distribuidas en escuelas, iglesias, centros culturales, bibliotecas y centros de día. En cuatro meses, 508.000 vecinos recibieron la vacuna, de los cuales 217.024 son adultos mayores.

Con respecto al dengue, este año hubo un aumento de casos con 7.306 confirmados. Por eso, se redoblaron los esfuerzos de atención y en el primer trimestre se realizaron 1.794 actividades de prevención y promoción, como descacharreos casa por casa, eliminación de criaderos, fumigaciones, relevamientos ambientales y estudios de foco, entre otras. Es el doble de las que se realizaron en los últimos tres años.
Miguel también hizo hincapié en el Plan Integral y Gradual de Puesta en Marcha de la Ciudad, elaborado con especialistas de cada tema y con los referentes de cada actividad que contempla 95 protocolos para la salida escalonada y progresiva de la cuarentena.

“Todas las actividades que hasta hoy tuvimos que dejar de hacer están contempladas en este plan para que la apertura sea de manera gradual en el tiempo. Y nos basamos en la salud integral de las personas para contribuir también a su bienestar emocional, contemplando por ejemplo las salidas recreativas de los chicos y la posibilidad de hacer actividad física al aire libre”, destacó. Miguel también apuntó que “es muy importante que todos entendamos que el rol individual es fundamental, y que flexibilizar algunas actividades no significa flexibilizar los cuidados personales”.