La celebración de Shavuot, que comienza hoy, con la salida de las primeras estrellas, y finaliza el sábado 27 de mayo, es una de las festividades más importantes del calendario hebreo, en la que se evoca que el pueblo judío recibió los diez mandamientos (la Torá) y las Mitzvot (normas y obligaciones) al pie del Monte Sinaí, hace más de 3.300 años.

Hagamos Historia:
Shavuot es la segunda de las tres fiestas de peregrinaje del pueblo hebreo. La festividad acaece exactamente 7 semanas después de la fiesta de las primicias, la cual se da al día siguiente al Shabat que se encuentra dentro de los 7 días de la fiesta de los panes sin levadura (15 al 21 de Nisán), exactamente cincuenta días después de ese shabbat. El nombre de la festividad tiene su origen en este hecho (Shavuot) La festividad conmemora la entrega de las tablas de la ley por parte de Dios a Moisés, en el Monte Sinaí. La festividad también tiene un significado agrícola: corresponde a la época del año en la que en Israel en particular y en el hemisferio norte en general se recogen los primeros frutos.

Es por esto que la festividad también es llamada la Fiesta de las Primicias. Antiguamente, la ofrenda que se llevaba al Templo de Jerusalén consistía justamente de las primicias. Esta festividad es un día no laborable según la ley judía. Su duración en la Tierra de Israel es de un día, mientras que en el Galut dura dos días, siendo que cada día comienza con la puesta del sol, y finaliza con la salida de las estrellas al día siguiente (similar al crepúsculo civil). Durante la festividad se acostumbra a comer productos lácteos, acompañados por los siete frutos o siete especies característicos de Eretz Israel.